|
1. |
|
|
|
|
1. UN AMANECER DE RÍO (Ceci Méndez / Demián Ornstein)
Para mí tío Guillermo, que ya es el río.
Amanece lento
y el sol inventa unos pescadores,
que como espejismos se van perdiendo en el horizonte
y las nubes ocres como caricias de la mañana
se acurrucan sobre el río Paraná.
Hay un camalote
que se abre paso entre las malezas
arrastrando aromas que lo acompañan desde la selva.
Sólo viaja libre sin preguntarse por su destino,
acunado por el tímido caudal.
Y así voy pintando con la voz,
paleta de color,
mi infancia, los paisajes y sus cielos.
Porque dondequiera que yo esté
habrá un rumor de ayer
y un río, que es lo eterno y verdadero.
Un mbiguá que pasa
va dibujando una sombra tenue,
y embelesa el agua con el vaivén de su andar alegre.
Él guardó el secreto durante años de las corrientes
y los cuentos con sabor a litoral.
Los sauces llorones
acompasados por el silencio
abrazan la tierra con sus raíces y sus desvelos,
y mis huesos hartos de buscar lejos al fin entienden:
todo supo desde siempre estar acá.
Y así voy pintando con la voz,
paleta de color,
mi infancia, los paisajes y sus cielos.
Porque dondequiera que yo esté
habrá un rumor de ayer
y un río, que es lo eterno y verdadero.
|
|
2. |
|
|
|
|
2. ETERNA CHABUCA (Ceci Méndez)
-Cueca-
La noche enciende el silencio
en una casa peruana
y le dicta sus secretos
a nuestra Chabuca Granda,
que en un cuaderno escolar,
pinta notas y palabras.
Poesías que son diamantes,
que todavía nos canta,
elegante y colorida,
con sonrisa enamorada.
Por eso América hoy,
le agradece y la ama.
No alcanzan los homenajes
para esta eterna poeta
que ensalzaba personajes
y rincones de Perú.
Tan rebalsada de gracia
limeña, faro de luz.
Mujer de fuerza serena,
inquieta y ocurrente,
con guitarras y cajones
celebra y une a su gente.
Mientras que alza su voz
delicada y valiente.
Guardiana de cada historia
aún esparce los ecos
de sus versos cantaditos
que van por el mundo entero.
Así es nuestra linda flor,
generosa como el cielo.
No alcanzan los homenajes
para esta eterna poeta
que ensalzaba personajes
y rincones de Perú.
Tan rebalsada de gracia
limeña, faro de luz.
|
|
3. |
|
|
|
|
3. CIELO ABIERTO (Ceci Mendez / Demián Ornstein)
-Huella-
A veces el andar
se vuelve incierto
se enreda el horizonte
con tanto viento.
Un tibio resplandor,
que me ensordece,
ahoga en mil preguntas
lo que amanece.
No sé si tengo fuerza
aunque me lo digan
el miedo siempre arrastra
alguna herida.
Pero sigo adelante con mi cantar
lleno, frágil, suelto
que es todo lo que tengo
y por lo que vivo.
Tal vez te canto hoy
porque te quiero
y sube por mis versos
tu cielo abierto.
Mis manos, mi emoción
y mis palabras
se funden con el aire
y ahí se desarman.
Por eso el deambular
del sinsentido
se vuelve más liviano
si es compartido.
No sé si tengo fuerza
aunque me lo digan
el miedo siempre arrastra
alguna herida.
Pero sigo adelante con mi cantar
lleno, frágil, suelto
que es todo lo que tengo
y por lo que vivo.
Tal vez te canto hoy
porque te quiero
y sube por mis versos
tu cielo abierto.
|
|
4. |
|
|
|
|
4. EL BAILE DE LAS LATAS (Ceci Méndez / Mariano Heler)
-Candombe-
Tiene nubes en las marcas de su cara
los pelos como cuerdas oxidadas
Harapos grises, difusos, olvidados
le cubren su estampa fantasmal
La escalera de la iglesia lo vigila
y la gente va tranquila sin notar,
que él ya está quieto como estatua de Budha,
preparando su minuto estelar
Entre todos los que pasan
él elige a un distraído
y se acerca sigiloso
como un haz de luz fugaz
Y le arroja un alarido
puntiagudo, congelado
y se ríe
y echa latas a bailar
El que iba caminando pega un salto
Lo mira sin hablar, desencajado
Pero esa risa lo contagia y lo abraza
Y juntos tiran pasos al compás
Y él se va, algunos dicen que volando
otros juran que hace rato que no está
pero sus latas retumban cada tanto
y en la iglesia aún se suelen escuchar
Y entre todos los que pasan
él elige a un distraído
y se acerca sigiloso
como un haz de luz fugaz
Y le arroja un alarido
puntiagudo y congelado
y se ríe
y echa latas a bailar
|
|
5. |
|
|
|
|
5. TONADA DESIERTA (Ceci Méndez / Demián Ornstein)
Flores de Yuchán
pintan la vereda
de canela y viento
Hilos de metal,
sombras de un tranvía
van borrando el tiempo
Y aunque es de día, la ciudad parece estar
dormida.
No pasa nadie por la calle, sólo hay
retazos de sueños sin luz
que son los ecos de todo lo azul.
Ronca soledad,
de tapar sonrisas
y esquivar miradas
Tibia libertad
como fotos viejas
que no dicen nada
Y en el silencio de este otoño singular
y absurdo,
por la ventana medio abierta veo entrar
ausencias que anidan en mí
y tal vez siempre estuvieron ahí.
Plaza sin niñez
sordos espejismos
de hamacas quietas
Yo miro sin ver
cómo va naciendo
la canción desierta
Mientras me aprendo de memoria el cielo que hoy
me toca,
abandonada de certezas creo que voy
sintiendo el vacío en mí
Tal vez me acerque a escucharlo por fin.
|
|
6. |
|
|
|
|
6. LA DE LOS DETALLES (Ceci Mendez / Demián Ornstein)
-Huayno canción-
Para Demián y para el mejor perro del mundo, Yurumí
Salir a encontrarme con tu mirada
y sentir tu rastro en mi piel abierta
es como un inmenso aroma a jazmín tendido
que viene a inundar la noche desierta
Respirar tu nombre cada mañana
parpadear tu risa sobre la almohada
o frenar las horas porque quizás queremos
ver pasar la luna por la ventana
Hoy te miro y busco una explicación al mundo en vos
y en tus ojos ciertos
que también me miran buscando en mí, tal vez, la voz
de todos los vientos
Los dos desarmados sobre la tierra
para ver de abajo las ramas altas
y poder latir al mismo compás del cielo
que aunque vuele lento no tiene pausa
La canción que flota por tu guitarra
tiene olor a pasto recién cortado
y cuando se cruza alguna palabra mía,
se adivinan cuentos revoloteados
Y hoy te miro y busco una explicación al mundo en vos
y en tus ojos ciertos
que también me miran buscando en mí, tal vez, la voz
de todos los vientos
|
|
7. |
|
|
|
|
7. O SOTAQUE ARGENTINO (Claudio Ceccoli / Ceci Méndez)
O meu sotaque não é de lá
Dessa lua ancestral
Dessas tardes no mar
O meu sotaque não é de lá
Desse vento fugaz
Desse bom carnaval
Dessa humildade unida que sempre celebra o Brazil
O meu sotaque não é de lá
Dessa noite central
desse tempo real
O meu sotaque não é de lá
Só que meu coração
Bate lá
brilha lá
vai pra lá
O meu sotaque não é de lá nem cá
Por mi tonada no soy de allá
de esa luna ancestral
de esas tardes de mar
Por mi tonada no soy de allá
de ese viento fugaz
de ese buen carnaval
de esa humildad tan unida que siempre celebra Brasil
Por mi tonada no soy de allá
de esa noche central
de ese tiempo real
Por mi tonada no soy de allá
pero mi corazón
late allá
brilla allá
va hacia allá
Por mi tonada no soy de allá ni de acá
Gosto do meu Brazil
Gosto da imensidão
Gosto da calma de
quando as ondas vão
se deitar no mar
Gosto de todos os sóis que vem para me atrapalhar
Gosto de toda sua graça, quando abrigo suas artes
Quando a saudade rebenta no peito e sai
Gosto de todas suas luzes
quando a noite fechada deixa ver os céus
que o Caetano vai pintar
ou que ele já pintou
ou que ele está pintando lá
agora sem saber
que eu sou louca por Brazil
Meu Brazil
Amo a mi Brasil
Amo su inmensidad
Amo la calma de
las olas que van
a acostarse al mar
Amo a todos los soles que me vienen a atrapar
Amo toda su gracia
cuando abrigo sus artes
cuando revienta en mi pecho tanta saudad
Y amo a todas sus luces
cuando la noche cerrada deja ver los cielos
que Caetano va a pintar
o tal vez ya pintó
o que está pintando allá
ahora sin saber
que soy loca por Brasil.
“Soy loca por ti América…” (*)
(*) Frase que le da nombre a una canción brasileña, con música de Gilberto Gil y letra de José Carlos Capinam.
|
|
8. |
|
|
|
|
8. A MIS ABUELOS (Juan Ruiz / Ceci Méndez)
En el borde de un cerro muy cercano a Medellín
Él creció en un ranchito y trabajó desde niño.
Ella desde El Retiro, a kilómetros de allí
fue aprendiendo de flores y penas, a soñar y a vivir.
Una tarde de aves esparciendo su color
quiso que él la encontrara, entre los cafetales
Su mirada de lluvia y la cadencia de su voz
anidaron en él como una mágica emoción.
Y enseguida supieron
que se habían elegido.
Tan valiente como simple
fue tomarse las manos
hasta la eternidad.
Hoy en esta misma tierra,
que todavía les canta,
va por el aire su risa
y ese don que tenían
de ser siempre un hogar.
Rebalsados de música y un fresco aroma a pan,
con caricias que sanan y calor de domingo,
inventaron de a poco un refugio familiar
y hoy en mi despedida, agradezco, y les doy mi cantar.
Fueron cincuenta años de abrazarse en cada sol
Un amor más inmenso que el océano abierto
hasta que un día a él la enfermedad lo derrotó
y después de unas pocas horas, ella lo siguió.
Y enseguida supieron
que se habían elegido.
Tan valiente como simple
fue tomarse las manos
hasta la eternidad.
Hoy en esa misma tierra,
que todavía les canta
va por el aire su risa
y ese don que tenían
de ser siempre un hogar
Músicxs:
Ceci Méndez - Voz
Demián Ornstein - Guitarra y arreglo
Jonathan Miale - Cello
Leonardo Avendaño - Voz
Julia Subatín - Contrabajo
Juan Clemente - Percusión
|
|
9. |
|
|
|
|
2. CHACARERA DE LOS NÓMADES (Ceci Méndez / Demián Ornstein)
Por rincones de este mundo incierto
en un lento deambular
van los nómades, curiosos,
con su paso inmaterial
En sus ojos llevan los paisajes,
y en los surcos de su piel,
todos los atardeceres
solitarios del ayer.
Con los tiempos arremolinados
y a veces a ras del sol,
por los rumbos más sinuosos
buscan su mejor color
Ya conocen el camino
a ningún lugar
Como caracoles, llevan en silencio
su destino de viajar
Van detrás del eco del olvido
en suelos por descubrir.
Cazadores de las nubes
ciegos de su porvenir
Arrastrando historias y sabores
de un legado ancestral,
memorizan cada pueblo
y esa hermandad fugaz.
Coleccionan calles y espejismos
amuletos sin ritual,
los idiomas de los vientos
y una oración de sal.
Ya conocen el camino
a ningún lugar
Como caracoles, llevan en silencio
su destino de viajar
|
|
10. |
|
|
|
|
10. CANCIÓN PARA LOS DÍAS DE LA VIDA (Luis Alberto Spinetta)
Para Fermín
Este dia empieza a crecer
voy a ver si puedo correr
con la mañana silbandome en la espalda
o mirarme en las burbujas
Tengo que aprender a volar
entre tanta gente de pie
cuidan de mis alas unos gnomos de lata
que de noche nunca ríen
Si la lluvia llega hasta aquí
voy a limitarme a vivir
mojaré mis alas como el árbol o el ángel
o quizás muera de pena
Tengo mucho tiempo por hoy
los relojes haran que cante
la la la la la
Y la espuma gira en torno a mi piel
me han puesto manos
para hablarle a las cosas de mí
Y al fin mi duende nació
tiene orejas blancas
como un soplo de pan y arroz
y un hongo como nariz
cuatro pelos locos
y un violín que nunca calla
sólo se desprende y es igual a las guirnaldas
y es que nunca calla
sólo se desprende y es igual a las guirnaldas
Este dia es algo de sal
me dejó vibrando al nacer
pesa y es liviano como un hilo sin nombre
suena un poco a mi guitarra
Tengo que aprender a ser luz
entre tanta gente detrás
me pondré las ramas de este sol que me espera
para usarme como al aire
Y es que al fin mi duende se abrió
tiene un corazón
de mantel y baton
y un guiño al ver que todo es verdad
Ya los gnomos cuiden
a un violín que siempre canta
nunca se adormece y es igual a las guirnaldas
y es que nunca calla,
solo se desprende y es igual a las guirnaldas
|
released February 21, 2021